Si nos acercamos por los rocodromos del Pais Vasco, descubriremos playas salvajes, prados verdes y gentes generosas, pero cuidado con los grados de dificultad, que esta gente no regala el grado. Eso si, la satisfacción de tocar la cadena o encadenar el bloque, será colosal.
A pesar de una geografia abrupta, cada vez surgen más lugares donde no parar cuando el tiempo hace imposible salir, o disfrutar tocando resina.
A continuación te los cuento:
The Factory Boulder: sus creadores nos dicen: ” es la casa de aquellos que tienen la escalada como forma de vida, de aquellos que quieren iniciarse en este apasionante mundo y de aquellos que simplemente quieren pasar un buen rato en un ambiente agradable”. Que más se puede pedir
Piugaz: en pleno Bilbao, con unas instalaciones muy completas para todo tipo de niveles de experiencia, lugar de encuentro de la comunidad resinera de la zona.
Monkada Boulder: También en Bilbao, local genial con monitores amables, donde poder iniciarte o sufrir un rato.
Queremos saber de más porque estamos seguros de que los hay. Échanos una mano a descubrirlos para poder compartirlos con los demás lobos.