Es importante hablar de algo que casi todos utilizamos y casi todos tenemos pero muy pocos hemos reflexionado antes de comprar sobre ello: son las bolsas de magnesio o magneseras.
En la mayoría de las ocasiones, acaban en nuestras manos por razones estéticas más que funcionales y es después, cuando nos damos cuenta de las ventajas y desventajas que tienen.
Pero antes, y por si aún hay alguien que no sabe a lo que nos estamos refiriendo vamos a explicar para qué sirven.
Las bolsas de magnesio, como su propio nombre indica, nos sirven para llevar siempre con nosotros el preciado magnesio y evitar que la sudoración natural de las manos empeore nuestro agarre.
Los materiales puede ser múltiples, pero lo más común por su resistencia y baja absorción de humedad, es el nylon. Por la parte interior suelen estar forradas de otro material que facilite la retención del magnesio y nos ayude a aplicar el magnesio en nuestras manos lo más rápidamente posible, como puede ser el algodón.
Dependiendo del tamaño las encontraremos con bolsillos o no, y con diferentes tipos de cierre para la boca de acceso, para que cuando dejemos de usarlas, todo el magnesio no se derrame por fuera.
Dependiendo de la actividad que vamos a realizar tendrán un tamaño o otro y así las vamos a clasificar:
Bolsa de magnesio pequeña
Bolsa de magnesio mediana
Bolsa de magnesio grande
Bolsa de magnesio pequeña
Cuando estamos realizando una actividad en que queremos llevar con nosotros magnesio pero reducir el peso al máximo, buscamos magneseras pequeñas muy sencillas, sin bolsillos ni necesariamente cierres, que nos molesten lo menos posible. Esta sería una buena opción para practicar psicobloc o un bulder de gran tamaño. O también para aplicar magnesio con el cepillo a las presas para mejorar su agarre al reducir la humedad.
Bolsa de magnesio mediana
Sería la que utilizaríamos cuándo vamos a escalar con cuerda. Necesitaremos que su tamaño sea el suficiente como para permitir el acceso de nuestra mano lo más fácil y rápidamente posible, ya que en la mayoria de las ocasiones estaremos sujetandonos con la otra mano a la presa. Por ello, lo más importante es la boca de acceso, que contará con un aro interior que le dé cierta rigidez y permita que se mantengan abiertas constantemente.
Obviamente, a mayor tamaño, mayor cantidad de magnesio podremos llevar. Por lo que si nuestro uso va a ser practicando escalada deportiva o dentro de rocódromo, no necesitaremos que sean excesivamente grandes porque al acabar la vía volveremos al suelo. Sin embargo, si estamos preparando una ruta de múltiples largos, es decir, cientos de metros, deberemos de procurar que nos permita llevar la cantidad suficiente hasta acabar la actividad. Este tipo de bolsas de magnesio suelen tener bolsillos para poder llevar además algunos objetos importantes cómo pueden ser llaves, barritas energéticas o incluso el móvil.
Bolsa de magnesio grande
Son las indicadas para actividades en las que buscamos la comodidad y no nos importa tanto el cómo se pueden llevar. Enfocadas en la escalada sin cuerda, boulder dentro o fuera del rocodromo o ejercicios de gimnasia.
Estás bolsas se dejarán en el suelo durante el ejercicio por lo que deberán de tener una base semirrígida que les permita no volcar y derramar el magnesio, además de unas paredes altas para que, al introducir las manos, no saquemos material fuera de la bolsa.
Un último factor a tener en cuenta a la hora de hacernos con nuestra bolsa de magnesio es su transporte, ya que mientras las pequeñas y medianas nos cabrán en cualquier mochila, para las grandes no será tan facil, si además tenemos que llevar agua, comida, ropa…
Así que la próxima vez que vayamos a comprar una bolsa de magnesio, tengamos todo esto en cuenta, más que los colores, estampados o barata que nos cuesta.
Nosotros fabricamos magneseras con estos parámetros en la cabeza, pero ¿que es fundamental para ti? Te escuchamos…